EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO
El expresidente de Alimport, exitoso empresario en Tampa
Dos años después de llegar a  Estados Unidos, Pedro Álvarez ha comprado y vendido al menos ocho  viviendas por un valor total de casi 600.000 dólares.
 TAMPA. (DDC)- Pedro Álvarez Borrego, el  expresidente de la estatal Alimport que durante años negoció las  compras cubanas de alimentos a Estados Unidos, se habría convertido en  un exitoso empresario en Tampa, Florida, a donde huyó en los últimos  días de 2010, informa el diario miamense El Nuevo Herald en un reportaje  publicado este sábado.
 Citando documentos oficiales, la  publicación indicó que Álvarez ha comprado y vendido al menos ocho  viviendas en Tampa por un valor total de casi 600.000 dólares y abrió  una compañía de administración.
Además, estaría realizando labores de consultor para empresarios estadounidense que quieren entrar en el mercado cubano.
El diario dijo que, no obstante, sigue  siendo un misterio cómo Álvarez, de 70 años, pudo comprar tantas  propiedades en tan poco tiempo.
Cuando escapó de la Isla, el  exfuncionario, que también fue presidente de la Cámara de Comercio de  Cuba, estaba bajo investigación criminal por un escándalo de sobornos en  en Alimport, que monopoliza las compras estatales de alimentos.
Antes de su apresurada fuga, su puesto  en Alimport lo convirtió en el poderoso negociador principal de  contratos con exportadores estadounidenses, que alcanzaron una cifra  récord de 711 millones de dólares en 2008 y convirtieron a Estados  Unidos en el quinto socio comercial de Cuba.
Cooperación con el FBI
El diario miamense citó a un  “funcionario informado” del Gobierno estadounidense, según el cual, tras  su llegada a Florida, Álvarez habría colaborado con el Buró Federal de  Investigaciones (FBI) “de forma renuente al principio”, aunque “al final  estuvo bien”.
Un amigo del expresidente de Alimport  afirmó que el FBI lo detuvo durante varias semanas, pero Álvarez “no les  dijo nada”. Ambas fuentes solicitaron el anonimato, señaló la  publicación.
Ralph E. Fernández, abogado de Tampa y  activista anticastrista que se quejó públicamente, en febrero de 2011,  sobre la hasta entonces secreta presencia de Álvarez en Tampa, dijo que  un alto agente del FBI en la ciudad lo urgió a no hablar más sobre el  caso.
Dave Couvertier, portavoz del FBI en  Tampa, no quiso comentar si su organización detuvo, interrogó y pagó a  Álvarez a cambio de información.
El funcionario estadounidense dijo que se le pagó, pero “no mucho, solo dinero de bolsillo”.
Álvarez, el empresario de Tampa
La participación de Álvarez en la compraventa de al menos ocho casas modestas en Tampa comenzó en octubre de 2011.
El valor total de las transacciones es  de unos 598.000 dólares, según el registro de propiedades del Condado  Hillsborough, indicó El Nuevo Herald.
De al menos tres habría obtenido un  aparente beneficio de 154.000, aunque no está claro cuánto podría haber  gastado en renovaciones. Una casa que compró por 40.000 dólares fue para  su hermana, Rosario Álvarez Borrego, quien la obtuvo por 100 dólares, y  aún posee otras cuatro.
Ralph E. Fernández dijo tener la certeza  de que Álvarez realizó esos negocios con dinero que de alguna forma  pudo obtener durante su época en Alimport.
“Indiscutiblemente que no llegó [a  Estados Unidos] como llegaron mis padres, con cinco dólares en el  bolsillo. Él no vino como los balseros, con su piel quemada y nada más”,  dijo Fernández.
Las adquisiciones y ventas inmobiliarias  del ex alto funcionario cubano aparecen en los registros del Condado  Hillsborough con varios nombres: Pedro Álvarez, Pedro Borrego, Rosario  Álvarez, Wise Management Group Corp. (fundada por Álvarez en marzo del  año pasado) y Arenas Blancas Investment, propiedad de su hija Lisette  Álvarez, quien aparentemente llegó a Estados Unidos en 2004.
El diario miamense dijo que Lisette  Álvarez confirmó que su padre se ha dedicado a comprar y vender  propiedades, pero declinó hacer más comentarios. Posteriormente amenazó  con llamar a la policía y acusar de “acoso” a los periodistas que  visitaron su oficina.
Ralph E. Fernández destacó asimismo que  recientemente recibió informaciones de que Álvarez había estado  trabajando como consultor para un empresario cubanoamericano de Miami  que trata de entrar en el mercado cubano.
Contratar a Álvarez como consultor es  “una magnífica oportunidad para alguien que considera hacer negocios con  Cuba, o los está haciendo. La percepción de tener a alguien como él a  bordo da una impresión fenomenal”, pero “podría ser de más valor que la  realidad”, consideró.
El hombre de Alimport
Álvarez fue designado para dirigir  Alimport en 1998, dos años antes de que el Congreso de Estados Unidos  autorizara las ventas de productos agrícolas a Cuba, como exención al  embargo.
En 2003, puso en marcha un controvertido  plan bajo el cual Alimport presionaba a políticos y exportadores de  Estados Unidos a firmar promesas de cabildear ante el Congreso  norteamericano para relajar las sanciones económicas contra la Isla. Esa  estrategia fracasó.
Álvarez salió de Alimport en 2009 y pasó a encabezar la Cámara de Comercio, de la cual fue suspendido a finales de 2010.
DIARIO DE CUBA informó en noviembre de  ese año que Álvarez había estado detenido varias veces en el  Departamento Técnico de Investigaciones (DTI) y que se le investigaba  por presunta corrupción.
John Park Wright IV, un empresario de  Naples, Florida, que firmó varios acuerdos de ganado con Alimport  durante la época de Álvarez, aseguró que éste “daba la impresión de no  tener un hueso corrupto en su cuerpo”.
John Kavulich, un empresario neoyorquino  que ayudó a fundar el Consejo Comercial y Económico Estados Unidos-Cuba  para explorar oportunidades de negocios con la Isla, indicó que había  “constantes rumores de corrupción” en Alimport, pero no con las  principales compañías agrícolas estadounidenses.
“Los rumores eran sustanciales, pero  para los pequeños actores” y empresarios de terceros países, debido a  que el embargo y las leyes anticorrupción de Estados Unidos habrían  traído duros castigos, agregó.
Kavulich dijo que los exportadores  agrícolas de Estados Unidos “querían beber vino y cenar” con Álvarez.  “Todos ellos estaban tras él, tratándolo con una mayor deferencia de la  que hubieran tratado a otro agente de compras en otro país”.
Por su parte, Álvarez “quería ser visto como una persona poderosa”, señaló.
the attachments to this post:
PEDRO ALVAREZ
 
 
 
 
 Entradas
Entradas
 
 
 
No hay comentarios:
Publicar un comentario