Miércoles, 18 de Junio de 2014 15:04
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Cuba actualidad, Ciego de Ávila, (PD) Hace algunos meses la Televisión cubana trasmite en el noticiero estelar de las 8 de la noche el segmento titulado Cuba Dice, con 
una
frecuencia de 2 ó 3 veces por semana, donde un equipo de reporteros
saca a la luz pública quejas y opiniones de la población sobre temas que
afectan directa e indirectamente al pueblo y la economía de la nación, y
algunos de carácter social, económico, etc. En ocasiones son
entrevistados los supuestos culpables de las violaciones detectadas y
los participantes hacen sugerencias para solucionar los problemas
descubiertos por el equipo de trabajo, que para nadie son un secreto y
mucho menos noticia.
unafrecuencia de 2 ó 3 veces por semana, donde un equipo de reporteros
saca a la luz pública quejas y opiniones de la población sobre temas que
afectan directa e indirectamente al pueblo y la economía de la nación, y
algunos de carácter social, económico, etc. En ocasiones son
entrevistados los supuestos culpables de las violaciones detectadas y
los participantes hacen sugerencias para solucionar los problemas
descubiertos por el equipo de trabajo, que para nadie son un secreto y
mucho menos noticia.
El programa ha creado expectativas y diversas opiniones de los
espectadores: hay quienes aseguran es una sátira al estilo de Pánfilo y
Chequera, personajes principales del espacio humorístico Vivir Del
Cuento, con sus acostumbradas -y autorizadas- críticas. ¿Quién no conoce
en Cuba que el pan no tiene calidad, que el pollo tiene escamas o el
pescado plumas? ¿Acaso no es del conocimiento general que numerosos
administradores desvían los recursos asignados a sus unidades con el fin
de enriquecer sus arcas personales? ¿O que el cemento y las cabillas
para construir una vivienda hay que comprarlos en el mercado clandestino
a precios excesivos, porque el gobierno no puede satisfacer la demanda
popular? ¿Quién ignora la pérdida de valores éticos en la sociedad
cubana?
espectadores: hay quienes aseguran es una sátira al estilo de Pánfilo y
Chequera, personajes principales del espacio humorístico Vivir Del
Cuento, con sus acostumbradas -y autorizadas- críticas. ¿Quién no conoce
en Cuba que el pan no tiene calidad, que el pollo tiene escamas o el
pescado plumas? ¿Acaso no es del conocimiento general que numerosos
administradores desvían los recursos asignados a sus unidades con el fin
de enriquecer sus arcas personales? ¿O que el cemento y las cabillas
para construir una vivienda hay que comprarlos en el mercado clandestino
a precios excesivos, porque el gobierno no puede satisfacer la demanda
popular? ¿Quién ignora la pérdida de valores éticos en la sociedad
cubana?
La experiencia acumulada por los cubanos en más de 50 años de penurias acrecentadas en las últimas décadas no necesita que un equipo de periodistas
hable de lo mismo con lo mismo programa tras programa, pero sin ofrecer
información alguna de los problemas resueltos gracias a sus
investigaciones. "Cuba Dice puede ser una estrategia
gubernamental para tranquilizar a la opinión pública, una manera de
aparentar libertad de expresión", opinó uno de mis entrevistados. Otros
consideran que esa labor sería más propia de los delegados de las
asambleas municipales del Poder Popular en sus reuniones de rendición de
cuentas a sus electores. Tal parece que los representantes del pueblo
carecen de autoridad y posibilidades para ofrecer esta información al
electorado. Se sabe que no cuentan con recursos para resolver los
planteamientos, pero es inadmisible que sean sustituidos por
periodistas.
hable de lo mismo con lo mismo programa tras programa, pero sin ofrecer
información alguna de los problemas resueltos gracias a sus
investigaciones. "Cuba Dice puede ser una estrategia
gubernamental para tranquilizar a la opinión pública, una manera de
aparentar libertad de expresión", opinó uno de mis entrevistados. Otros
consideran que esa labor sería más propia de los delegados de las
asambleas municipales del Poder Popular en sus reuniones de rendición de
cuentas a sus electores. Tal parece que los representantes del pueblo
carecen de autoridad y posibilidades para ofrecer esta información al
electorado. Se sabe que no cuentan con recursos para resolver los
planteamientos, pero es inadmisible que sean sustituidos por
periodistas.
Al decir de mis entrevistados, Cuba Dice no dice nada, toda su
información es conocida por los cubanos, no es más que la acumulación de
problemas que han afectado al pueblo durante décadas y de los que nadie
tiene la solución, es tocar la llaga y no poner la cura. Las
dificultades y problemas expuestos en el programa persisten y se
acrecientan, tal parece que son nuevos o ahora fue que se enteraron.
¿Dónde viven esos periodistas sorprendidos ante situaciones existentes
durante años, y qué pasa con las soluciones? Según estas opiniones, el
tiempo destinado al segmento informativo pudieran sumarlo al popular
Vivir Del Cuento, al final son casi la misma cosa.
Para Cuba actualidad:
valdirobe2012@gmail.com
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