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jueves, 20 de enero de 2011

¿Por qué no entró Manfred Nowak?. Verdades que son verdades

EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO

¿Por qué no entró Manfred Nowak?

Confieso que cuando se anunció la visita a la Isla del relator de derechos humanos contra la tortura Manfred Nowak, creí que era otra tomadura de pelo. Un entretenimiento más de las Naciones Unidas para con el tema cubano. Mis dudas aumentaron cuando el mismo funcionario declaró que durante su visita a la Isla, entrevistaría a presos y ciudadanos libremente y que en su periplo se dejaría llevar por su propia agenda y no por la del régimen de la Isla. Pero cuando tuve información de que Nowak era conocido por su imparcialidad, prestigio y la honestidad, di la visita por imposible. No podría imaginar a ese funcionario visitando las tenebrosas celdas de castigo y aislamiento en Kilo 8, las incrementadas en El Pre, las tristemente celebres polacas de Agüica en Matanzas, el 47 “la pizzeria” o “rectangulo de la muerte” en el Combinado del Este, entre otras. 

¿Como podrían explicarle los carceleros al funcionario de la ONU las miserables condiciones de estos lugares: la ausencia de las más mínimas condicione higiénico-sanitarias, el reducido espacio de estos cajones de tortura? Por otra parte, ¿de que forma exponerle a Nowak la presencia de cientos y cientos de reos automutilados, sin piernas, ojos, con brazos y extremidades tasajeadas y el porqué se hacían y hacen eso? ¿Cómo podría la dictadura evitar los escalofriantes testimonios de torturas de Orlando Zapata, Juan Carlos Herrera, Arturo Suárez, Librado Linares, Andry Frómeta, Egberto Escobedo, Mario Alberto Pérez Aguilera, Julián Antonio Monés Borrero? ¿Cómo esconder la crítica situación de los sexagenarios enfermos y en prisión Armando Sosa Fortuny, Miguel Díaz Bauza, Cecilio Reinoso Sánchez, y otros patriotas que el régimen esconde en sus celdas y de los que muy pocos o casi nadie habla? Situación embarazosa cuando los reos le contaran a Manfred Nowak lo que les hacen cuando se declaren en huelga de hambre y en fin, de cómo es la alimentación y la atención médica en las cárceles. 

¿Cómo justificarían ante ese prestigioso funcionario la sentencia de los presos del marzo negro del 2003, en el que las acusaciones de mercenarios al servicio de una potencia extranjera se basaron en la posesión de unas rústica maquinas de escribir, dos o tres sacos de libros censurados porque tratan sobre temas de derechos humanos y democracia, o por reportar a las emisoras y organismos internacionales denuncias de probados actos de torturas o sencillamente ejercer el periodismo o sindicalismo de forma independiente. ¿Cómo esconder a Manfred Nowak las huellas de torturas, huesos rotos, nervios destrozados de cientos y cientos de reos en Cuba. ¿Dónde esconder los tristemente celebres vedugos Carlos Bernal Rubio, Orelvis Escudón, Emilio Rodríguez Cruz “El Indio”, Roberto Pérez Guillén “El Papa”, Juan Enrique Medina, Félix Molina, Junco “El Tranquero Mayor”, Nasco, los hermanos Félix y Mariano Guzmán, entre tantos y tantos que forman parte de un largo listado de cobardes criminales que escudados en la impunidad, su traje militar, y la numerosa banda de criminales quienes les apoyan y golpean a los reos? ¿Y como callar a sus incontables víctimas de atropellos? ¿Cuánto tiempo y recursos les llevaría modificar la celda de instrucción, los cuarteles de la policía política en Guantánamo, Pedernales en Holguín, y las tantas otras que a lo largo y ancho del país existen? ¿Cómo poder convencer a los jerarcas de la represión y al menos durante el tiempo que Nowak esté de visita en Cuba hay que alimentar los presos como si fueran seres humanos y no negarles la atención médica? ¿Cuánto trabajo y esfuerzo daría a los carceleros, médicos y tribunales que los internos, como ahora eufemisticamente los pretenden llamar sus carceleros, son seres humanos y merecen ser tratados como tales? ¿Cómo callar la dignidad y vergüenza de los miles y miles de cubanos que a pesar de que seran luego reprimidos, estan dispuestos a brindar testimonio? Por todo ello, y porque en Cuba hay muchos Reina Luisa Tamayo Danger y Ariel Sigler Amaya, no entró…o mejor dicho, no le permitieron entrar al funcionario de las Naciones Unidas.  
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Una respuesta

Muy buena reflexión Antunez tus verdades laceran la imagen de un régimen que ha intentado siempre ocultar su lado oscuro como la Luna. Pero uds son el Sol que ilumina y desmiente pues han vivido la experiencia del castrismo en su lado oscuro.
Aunque la sociedad cubana aparentemente se encuentra en calma en su interior se está gestando un nuevo proceso liberador.
Ya Paya ha pedido un Plebiscito a toda voz, para que el pueblo decida y mande. Y el que esté frente al Gobierno cumpla el Mandato de la Obediencia Popular, Gobernar para Servir al pueblo, de lo contrario No sirve para Mandar.

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