Benedicto XVI expresa “su cercanía” con todos los afectados por el huracán Sandy

El Papa también hizo llegar el viernes “su sentido pésame” a los familiares de las once víctimas del huracán Sandy, a través de una carta enviada por el secretario de Estado del Vaticano al presidente de la Conferencia de Obispos Cubanos y arzobispo de Santiago de Cuba, monseñor Dionisio García Ibañez

Desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico Vaticano, durante el rezo del Ángelus, el Papa Benedicto XVI ha expresado este domingo su cercanía con todos los afectados por el reciente huracán que azotó a Cuba, Haití, Jamaica y Bahamas y que “ha causado varios muertos y enormes daños que han obligado a muchas personas a dejar sus propias casas”.

Según un reporte de Europa Press, después de presidir la Celebración Eucarística en la Basílica de San Pedro, junto a los padres sinodales para concluir la XIII Asamblea General Ordinaria del Sínodo de los Obispos, el Pontífice ha invitado a “la oración y la solidaridad, para aliviar el dolor de los familiares de las víctimas y ofrecer ayuda a los miles de afectados”.

Benedicto XVI también hizo llegar el viernes “su sentido pésame” a los familiares de las once víctimas mortales del huracán Sandy, que azotó el oriente cubano al amanecer del jueves 25 de octubre, según informó la agencia Zenit.

A través de una carta enviada por el secretario de Estado del Vaticano, el cardenal Tarcisio Bertone, al presidente de la Conferencia de Obispos Cubanos y arzobispo de Santiago de Cuba, monseñor Dionisio García Ibañez, Benedicto XVI manifiestó su dolor ante “las dramáticas consecuencias del paso del huracán Sandy por esa amada nación, ocasionando víctimas, heridos y numerosos daños materiales, y dejando sin hogar a muchas familia”.

La agencia añade que en un primer recorrido por la Diócesis, el arzobispo de Santiago de Cuba pudo constatar la “situación dramática de devastación en la que decenas de miles de personas han perdido sus casas”.

El arzobispo señaló además que el 85% de los templos de esta ciudad necesitan una intervención grande.

Los medios estatales cubanos cifraron en once el número de víctimas del huracán. En Santiago fallecieron nueve personas, cuatro de ellas por derrumbes de techos. Otras dos personas fallecieron en Guantánamo a causa de la caída de árboles.

En su mensaje, el papa “ofrece fervientes sufragios por el eterno descanso de los fallecidos, al mismo tiempo que pide al señor conceda su consuelo a quienes sufren estas graves desgracia.”

Benedicto XVI dijo que ora para que “incremente en la comunidad cristiana y en todas las personas de buena voluntad sentimientos de fraterna solidaridad para colaborar en la reconstrucción de las zonas afectadas.”

El papa visitó Santiago de Cuba en marzo de 2012 y pasó una noche en una residencia cercana al Santuario del Cobre.

Precisamente varios vitrales y la puerta principal del Santuario han sido afectado por el paso del huracán, según indicó García Ibáñez.

En la Casa de Encuentros, aledaña a la residencia en donde descansó el papa, han sido afectados de manera especial los techos de la capilla y del comedor, así como el cielo raso de las habitaciones que habían sido restauradas, a lo que se suman cristales rotos y árboles caídos.

“Tengo calma y mantengo el ánimo”, ha dicho el arzobispo en una entrevista. “Cáritas ya da pasos para ver cómo se canalizan las necesidades”.

En su mensaje, Benedicto XVI también encomienda a las víctimas y a sus familiares “a la materna intercesión de Nuestra Señora de la Caridad del Cobre”, e imparte “de corazón la confortadora bendición apostólica, como signo de afecto al querido pueblo cubano, tan presente en su corazón de pastor de la Iglesia universal”.