EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO
Chávez utiliza el poder electoral para arroparse de legitimidad
Los analistas, quienes hablaron en un foro organizado por el Centro de Política Hemisféricade la Universidad de Miami, dijeron que la elección del 7 de octubre no fue realizada dentro de un contexto democrático, resaltando que una seguidilla de irregularidades y tácticas de juego sucio aunado por el abuso del poder emprendido por el gobierno de Chávez dejaron a la oposición sin una oportunidad real de ganar la presidencia.
“El mejor calificativo [para describir el modelo político implementado en Venezuela] es el de neo-autoritarismo, bajo el cual tenemos algunas formas democráticas que son muy necesitadas por este tipo de régimen, en un mundo globalizado, […] pero donde el eje central del modelo [la presidencia de Chávez] no está dispuesto a ser reemplazado, independientemente de lo que eso implique”, comentó Carlos Blanco, profesor de la Universidad de Boston.
Blanco, durante su exposición en el foro Panorama Post Electoral Venezolano, dijo que la necesidad de preservar una apariencia democrática en la arena internacional lleva al chavismo a sostener frecuentes elecciones, y en algunas de ellas permitir que la oposición esté en condiciones de competir libremente.
Pero no cuando la presidencia de Chávez está en juego.
“Este tipo de régimen bloquea cualquier cosa que realmente les amenace con reemplazarlos por medios electorales, ya tengan que usar métodos legales o ilegales o métodos violentos o pacíficos”, insistió Blanco, un experto en temas de gobernabilidad.
Chávez emergió victorioso en la elección presidencial del mes pasado, al sacar el 55.08 por ciento de los votos a su favor frente al 44.30 por ciento obtenidos por el opositor Henrique Capriles.
Los analistas, no obstante, dijeron que esos comicios no fueron ni justos, ni libres.
“Antes y durante la elección, el gobierno de Chávez violó incluso los más mínimos estándares democráticos y estableció un número de obstáculos para que la oposición no solo no pudiese ganar sino que incluso tuviese dificultades en participar”, comentó Natalia Brandler, Directora del centro investigaciones francés, Groupe d’études politiques sur l’Amérique latine (GEPAL) y profesora de la Universidad Simón Bolívar de Venezuela.
“Estas elecciones fueron sistemáticamente manipuladas por el gobierno. Fueron supuestamente realizadas en seguimiento de procedimientos democráticos, pero las reglas y las normas fueron autoritarias”, expresó.
Brandler resaltó que el régimen de Chávez hace uso de una variedad de mecanismos de manipulación y coerción que excluye “completa e irreversiblemente” la posibilidad de establecer una alternativa política en el país.
El gobierno permite que la oposición exista porque está le sirve de oponente contra el cual puede ganar elecciones, obteniendo de esa manera la apariencia de democracia, pero al mismo tiempo establece obstáculos que limitan la capacidad de sus adversarios de competir realmente.
Entre estos obstáculos, se encuentra eliminación del financiamiento público a los partidos de la oposición y la presión ejercida por el gobierno a actores privados para que éstos dejaran de brindar financiamiento a la alternativa democrática.
Esto se produce mientras el oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) recibía recursos públicos ilimitados, comentó.
Adicionalmente, el gobierno hace uso del miedo para aplastar a la oposición, dijo Brandler al resaltar las declaraciones formuladas antes de la elección por el Ministro de Defensa Henry Rangel Silva, quien advirtió que la Fuerza Armada Nacional no aceptaría un gobierno de la oposición.
“La oposición decidió ir de todas maneras a las elecciones porque pensó que podría revertir la situación con una movilización masiva del electorado a favor de la oposición incluso sabiendo que existían normas fraudulentas. Estaban muy motivados particularmente en esta elección”, dijo la profesora.
Pero el resultado demostró que el optimismo no era suficiente.
Aún cuando Brandler admitió que hasta el momento no ha aparecido una pistola humeante para demostrar que el fraude fue cometido bajo el auspicio del Consejo Nacional Electoral (CNE), entidad que es casi absolutamente controlada por Chávez, la profesora dijo que sí hay las suficientes pruebas de mal manejo para cuestionar los resultados.
Una de estas, fue la movilización masiva de electores que se habían inscrito en la Misión Vivienda, programa que promete resolver el problema habitacional de cientos de miles de venezolanos que carecen de hogar. Muchos de ellos fueron traslados y escoltados hasta las urnas para obligarles a votar a favor de Chávez, comentó.
Aníbal Romero, profesor retirado de la Universidad Simón Bolívar, dijo que Chávez es un “verdadero revolucionario” y que pensar que él aceptaría una derrota electoral es un error cometido varias veces por la oposición.
“Las falsas esperanzas son difíciles de matar”, dijo Romero antes de señalar que la conciencia cívica generada durante los 40 años previos de democracia registradas en el país antes de que Chávez emprendiera su revolución socialista a inicios de la década pasada “aún ejerce influencia en las mentes y corazones de muchos venezolanos” quienes aún creen que el voto es sagrado.
“Muchos venezolanos, aunque quizás no de una manera conciente, creen que la democracia y la voluntad popular es la última autoridad”, expresó.
Por otro lado, Chávez sigue contando con respaldo entre la comunidad internacional, por un lado debido a que “las dictaduras de izquierda” suelen ser vistos con mejores ojos que las de derecha, pero también porque tiene cercanos aliados con grandes intereses invertidos en la continuidad de su régimen, dijo.
“Y Chávez en realidad tiene muy pocos enemigos, que es algo que hay que enfatizar. El tiene aliados que son bien conocidos, países como Irán, Cuba, Ecuador, Nicaragua, algunos países en Europa. Y también hay países neutrales, y entre ellos el gobierno de Estados Unidos”, comentó Romero.
“El gobierno de Estados Unidos ha tomado una posición relativamente complaciente hacia Chávez […] Y yo entiendo eso. ¿Por qué hemos de esperar que Estados Unidos tome más acciones contra Chávez si nosotros en Venezuela no estamos dispuestos a hacerlo?”, preguntó. AMD/El Nuevo Herald
No hay comentarios:
Publicar un comentario