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Revierten sentencia basada en "origen cubano" de acusado de Miami
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- Publicado el Jueves, 16 Agosto 2012 13:25
- Por Café Fuerte
GIRALDO TRUJILLO CASTELLÓN RECIBIRÁ UNA NUEVA SENTENCIA.
Un tribunal federal de apelaciones ordenó dictar una nueva sentencia contra Giraldo Trujillo Castellón, residente en Miami, argumentando que la actual condena fue basada en prejuicios sobre su condición de cubano.
El Tribunal de Apelaciones del Séptimo Circuito Judicial, con sede en Chicago, falló que el juez de distrito Rudolph Randa manejó la cubanía del acusado como clave para imponerle seis años de cárcel, con derecho a libertad condicional, luego de cumplir dos. El fallo fue dado a conocer esta semana.
Trujillo Castellón, de 32 años, se declaró culpable de robo de identidad y de usar sin autorización cuentas bancarias de otras personas. Había sido arrestado a principios de octubre de 2010 en Richfield, Wisconsin, junto con Marco Tabares y Laureano Puerto, por comprar con tarjetas de crédito falsas dos equipos de sonido y otras mercancías en las tiendas Kohl y Cabela, con valor aproximado de $140 mil dólares.
Trujillo Castellón, de 32 años, se declaró culpable de robo de identidad y de usar sin autorización cuentas bancarias de otras personas. Había sido arrestado a principios de octubre de 2010 en Richfield, Wisconsin, junto con Marco Tabares y Laureano Puerto, por comprar con tarjetas de crédito falsas dos equipos de sonido y otras mercancías en las tiendas Kohl y Cabela, con valor aproximado de $140 mil dólares.
Tras escuchar la sentencia, Trujillo Castellón resolvió apelar por no haberse apreciado circunstancias atenuantes y ponderando injustamente su origen nacional.
Es la primera vez que una sentencia judicial contra un cubano de recientes oleadas migratorias hace explícito un prejuicio por su "procedencia nacional". Trujillo emigró de Cuba en 1997, cuando tenía 17 años.
El panel de apelación en Chicago rechazó el primer motivo, pero no podía menos que admitir el otro. Al dictar sentencia, el juez Randa echó en cara a Trujillo Castellón que "en los Estados Unidos la propiedad privada es sacrosanta y no propiedad del gobierno (…) Esa es la forma en que vivimos aquí y por ello usted comete un grave delito al hacer lo que hizo".
El panel de apelación en Chicago rechazó el primer motivo, pero no podía menos que admitir el otro. Al dictar sentencia, el juez Randa echó en cara a Trujillo Castellón que "en los Estados Unidos la propiedad privada es sacrosanta y no propiedad del gobierno (…) Esa es la forma en que vivimos aquí y por ello usted comete un grave delito al hacer lo que hizo".
El fantasma de los marielitos
Aunque recalcó que la culpa del acusado no podía descargarse sobre Cuba, el juez comentó que la conducta de Trujillo Castillón recordaba los tiempos en que "llegaron a EE. UU. los marielitos y promovieron una oleada de crímenes por doquier". Agregó que Jimmy Carter había acogido a todas las personas que Castro sacó de prisiones y hospitales psiquiátricos.
Hasta el abogado defensor de Trujillo Castillón alegó que el robo en Cuba se valora más bien como cosa de Robin Hood y los inmigrantes cubanos afrontan dificultades para adaptarse al American way of life.
Hasta el abogado defensor de Trujillo Castillón alegó que el robo en Cuba se valora más bien como cosa de Robin Hood y los inmigrantes cubanos afrontan dificultades para adaptarse al American way of life.
El fiscal no sólo trajo a colación que la conducta fraudulenta de Trujillo Castillón podría vincularse a la cubanía del acusado, porque "a actitud hacia la propiedad privada en Cuba es diferente", sino que largó la advertencia de que el acusado "vino para acá pensando que sería fácil, entonces le sugiero a él y los demás como él que recapaciten o no vengan".
La jueza ponente del fallo de apelación, Diane Wood, estimó que el juez Randa no había guardado la debida distancia frente al caso por desfogarse en declaraciones contrarias a la norma federal de que el origen nacional, la raza, el sexo, el credo, la religión y la posición socioeconómica son irrelevantes al imponer sentencia.
"Englobar al acusado con los marielitos y contrastar expresamente los valores de la sociedad estadounidense con la gente venida de Cuba indican que el juez de primera instancia manejó el origen nacional como factor determinante de su sentencia", precisó Wood.
El trámite judicial siguiente se reduce a devolver las actuaciones al juez Randa para que dicte nueva sentencia sin tomar en cuenta que Trujillo Castellón nació en Cuba.
El trámite judicial siguiente se reduce a devolver las actuaciones al juez Randa para que dicte nueva sentencia sin tomar en cuenta que Trujillo Castellón nació en Cuba.
De seguro que el juez saldrá del paso rebajando los años de cárcel, para acatar el fallo del tribunal superior. Más difícil le será convencer de que ha podido librarse del prejuicio contra el ser cubano.
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