Deserta a EEUU una de las hijas del vicepresidente cubano Marino Murillo, según 'El Nuevo Herald'
MADRID, 28 Ago. (EUROPA PRESS) -
Una de las hijas del vicepresidente cubano Marino Murillo, uno de los hombres fuertes del Gobierno de Raúl Castro, desertó este mes a Estados Unidos y actualmente se encuentra viviendo en la ciudad de Tampa, en Florida, uno de los principales enclaves de los cubano-americanos en el exilio, informa este martes el diario norteamericano 'El Nuevo Herald'.
Fuentes "con conocimiento de la situación" revelaron al rotativo que Glenda Murillo Díaz, de 24 años, llegó a Estados Unidos a través de la frontera por México sin ningún tipo de visado, lo que hace suponer que se benefició de la conocida Ley de Ajuste Cubano --"pies secos, pies mojados"-- que establece que cualquier cubano que pise territorio estadounidense podrá quedarse en el país.
Una persona cercana al caso informó a 'El Nuevo Herald' de esta deserción poco después de que se produjo, pero no fue sino hasta el lunes que el diario lo pudo confirmar.
Murillo Díaz habría dejado la isla hace más dos semanas para asistir a un congreso de psicología en México. De allí partió hacia Tampa, ciudad donde vive su tía materna Idania Díaz, que está casada con Boris Loynaz, según han precisado las fuentes.
Su abuelo, Rolando Díaz, residente de La Habana, estaba visitando a Idania Díaz en Tampa cuando Glenda llegó. Su padre, el vicepresidente Murillo, "rompió en llanto cuando supo de la deserción", aseguró un familiar en la capital cubana a varios vecinos.
El territorio mexicano constituye una de las rutas más utilizadas por los cubanos que desean entrar en Estados Unidos y beneficiarse de la ley "pies secos, pies mojados", muy criticaba por el régimen castrista.
'El Nuevo Herald' logró hablar con un hombre en La Habana que se identificó como su esposo, quien aseguró, sin precisar más detalles, que Glenda estaba en Tampa, pero al ser consultado sobre si había desertado se mostró confuso porque dijo primero que ella estaba en México y después que se encontraba en la capital cubana.
Marino Murillo, uno de los ocho vicepresidentes que hay en Cuba, es conocido como el 'zar de las reformas' que ha puesto en marcha el Gobierno de Castro para "actualizar" el modelo socialista de la isla. También es un influyente y poderoso miembro del buró político del gobernante Partido Comunista de Cuba.
La última deserción importante que se conoce ocurrió a finales del año 2010 cuando Pedro Álvarez, exdirector de la agencia gubernamental a cargo de todas las importaciones de alimentos y productos agrícolas, se fue a vivir también a Tampa.
Álvarez, investigado en Cuba por delitos relacionados con corrupción, nunca ha dicho públicamente que se encuentra exiliado en Estados Unidos.
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