La Asamblea Nacional de Cuba escuchará a Raúl Castro y estudiará el presupuesto
La Habana, 19 dic (EFE).- La Asamblea Nacional de Cuba estudiará este domingo los presupuestos del Estado para 2010 y escuchará un discurso del presidente del país, el general Raúl Castro, que se espera esté centrado en la honda recesión económica que padece la isla.
La convocatoria oficial de la segunda reunión plenaria de 2009 del parlamento unicameral cubano, emitida por su presidente, Ricardo Alarcón, no mencionaba agenda ni temario, pero es habitual que las sesiones terminen con el discurso del jefe del Estado.
Durante las reuniones de la Asamblea, en la mesa presidencial se conserva vacío desde julio de 2006 el sillón del anterior mandatario, Fidel Castro, de 83 años, que no ha aparecido en público desde entonces, pero sigue siendo primer secretario del gobernante Partido Comunista (se hermano Raúl es segundo secretario).
La Asamblea Nacional se reunió por última vez el pasado 1 de agosto y tiene una actividad legislativa mínima: en el periodo anterior aprobó solo las cinco leyes de los presupuestos gubernamentales y una ley orgánica, la de la Fiscalía Militar.
Las doce comisiones sectoriales de la Asamblea comenzaron el miércoles pasado las reuniones preparatorias de la plenaria.
Los diputados recibieron informaciones de los diferentes ministerios y de organismos fiscalizadores sobre la situación del país y los planes y proyectos prioritarios del Gobierno.
La principal función de la Asamblea Nacional es nombrar, cuando se produce un relevo en la cúpula cubana, a los miembros del Consejo de Estado, máximo órgano gubernamental, cuyo presidente es jefe del Estado, del Consejo de Ministros y del Consejo de Defensa Nacional (Raúl Castro es el titular desde febrero de 2008).
La sesión plenaria de este domingo será la cuarta ordinaria de los 610 diputados elegidos en enero de 2008.
Tendrá lugar cuando Cuba vive una recesión que incluye una caída del 36% del comercio exterior de bienes y cuantiosas pérdidas de ingresos por caída de las exportaciones de productos clave, como el níquel, y de servicios como el turismo, según fuentes oficiales.
La crisis ha llevado al general Castro a dictar recortes en el presupuesto, retrasos en los pagos de las deudas, retención de divisas de empresarios extranjeros, reducciones drásticas del consumo de energía y merma de los alimentos subsidiados que se entregan a la población, entre otras medidas.
La economía cubana, muy deteriorada desde que se hundió la Unión Soviética hace dos décadas, se agravó por el paso por la isla de tres huracanes que causaron pérdidas por 10.000 millones de dólares en 2008, además de las repercusiones de la crisis financiera global.
A ello se suma el bloqueo económico que Estados Unidos impone a la isla desde hace medio siglo y la ineficacia, reconocida por las propias autoridades, del sistema productivo del único país de América gobernado por un partido que se dice comunista.
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