EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO
PLAYA LA PANCHITA: COOPERATIVA PESQUERA, DONDE NO SE VENDE PESCADO A LA POBLACIÓN. SIEMPRE SALEN EN CAMIONES REFRIGERADOS CON RUMBO DESCONOCIDO.
SOLO "RESOLVIENDO" ES QUE PUEDES CONSEGUIR ALGO EN TUS DÍAS DE VACACIONES. LOS HABITANTES LOCALES COMEN DE LO QUE PUEDEN "RESOLVER" SUS FAMILIARES PESCADORES.
ESO SI DEBIERA SER NOTICIA: UNA ISLA QUE SE LE QUITA EL DERECHO A SUS POBLADORES DE VIVIR DE LO QUE PRODUCE EL MAR, LO POCO QUE SE OBTIENE, VA DIRECTO A LA ADMINISTRACIÓN DEL SEÑOR FEUDAL
'Resolver' en Cuba es mucho más que un verbo, es casi una filosofía de vida. El diccionario lo define como 'tomar una resolución' o 'aclarar, solucionar, solventar'. Pero en esta isla de frecuentes escaseces sustituye a verbos como comprar, pagar, sacar, arreglar, pero también robar, sustraer, coger, o desvalijar. Se resuelven sacos de cemento, billetes de autobús o de avión, entradas a discoteca, botellas de ron, vino o ladrillos. Pero el diario Granma destapó un ejemplo más que escandaloso. A las claras, ante los ojos de toda una comunidad, incluidas diversas autoridades, se levantaron en Playa La Panchita, en la provincia de Villa Clara, más de 300 viviendas de fin de semana y vacaciones utilizando 25 kilómetros de traviesas y rieles robados de las vías férreas ahora en proceso de reparación y 59 crucetas y angulares extraídos de torres de alta tensión y postes telefónicos.
El órgano de prensa del Partido Comunista de Cuba (PCC) emplea tres páginas ilustradas con grandes fotografías para exponer el caso que se remonta al año 2001, cuando el huracán Michelle destruyó gran parte del poblado costero donde muchas familias tenían sus casas de veraneo, posibilidad permitida por la ley que admite la titularidad de una casa en la ciudad y otra en la playa o el campo. Los propietarios afectados insistieron en que les fueran repuestas sus moradas temporales. Consiguieron la autorización en el 2003 con la condición de que la reconstrucción fuera con “esfuerzos y medios propios” y de cumplir con regulaciones oficiales.
Un año después se detallaban hasta 46 requisitos, pero la norma dejó resquicios. Se permitía el uso de raíles de “70 a 80 centímetros” y otros materiales, supuestamente en desuso de las vías férreas. Por obra y gracia de la vista gorda, el “descontrol y la falta de rigor” dice el Granma, “alcanzaron cinco, siete y hasta más de 10 etros en horcones, columnas, portales, cercas y otros fines.
La Panchita era un pueblo con casas de pescadores, normalmente construcciones de madera de una sola planta y techos de guano (hoja de palma) con un porche pequeño como todo lujo. Pero la inspección de la Fiscalía provincial se encontró con construcciones de dos pisos, con cercas, terrazas cubiertas, corredores externos, y techos de fibrocemento y zinc importados para atender a los damnificados de los huracanes recientes.
9.631 metros de carriles robados para construir casas
El informe de los especialistas cita que en los 328 terrenos inspeccionados, donde existen 240 viviendas terminadas, 44 en estructura, y 30 en fase de terminación, se emplearon 9.631 metros de carriles”, la mayoría reutilizables en el remozamiento férreo emprendido por el régimen para abatatar los costos de transporte de mercancías. Concluyeron que el “82 % de las viviendas revisadas emplearon en su construcción raíles, ya sea en la estructura, cercas perimetrales o tanques elevados”, la mayor parte procedentes del Ministerio del Azúcar. Los propietarios reconocieron la imputación. También que usaron traviesas de hormigón para los cimientos valoradas en total por unos 20.000 dólares.
El diario se lamenta de “la indolencia de algunos empresarios que desarticularon 25 kilómetros de línea”. También recuerda que el máximo líder cubano, Fidel Castro, 84 años, alertó en el 2005 que los tolerantes, los que congenian con lo mal hecho, los corruptos podían destruir la revolución. “De ahí que la impunidad ante estos sucesos sea lo más desmoralizante que puede ocurrir en una sociedad”. Lo que ahora es seguro que los implicados en este caso no quedarán impunes. Y hablamos de funcionarios del ministerio de vivienda provincial, autoridades locales del Partido Comunista de Cuba, de la municipalidad.
No se libran ni los miembros de los Comités de Defensa de la Revolución, que supuestamente debían hacer guardia no solo contra “el enemigo externo” en hacerla también “contra el enemigo interno que pretende minarnos desde adentro con el descontrol, el desvío de recursos y otros fenómenos ajenos a la ideología de la Revolución. Robar propiedad ajena es punible. Sin embargo, hay quien ha “comprado” –sin saberse cómo- un árbol de madera preciosa en el interior del país para trasladarlo a la capital y encargar a un carpintero muebles de cocina, libreros o un sofá.
Si hubiera un mercado amplio y accesible con todos estos productos no habría que “resolver” a costa de destruir. ¿A eso aspira el presidente Raúl Castro con su reforma económica?. El que tenga el dinero que pueda encontrar lo que necesite para construir o arreglar. El problema será para quienes no lo tienen o no quieran pagar un precio más alto. Acabar con una inercia de 50 años no será fácil.