El Ministerio de Salud Pública de Cuba (MINSAP) se ha mantenido publicando diariamente desde el 11 de marzo de 2020 hasta el presente, datos de la epidemia de COVID-19 en Cuba mediante conferencias de prensa brindadas por el Director Nacional de Epidemiología el doctor Francisco Durán García y mediante informes en el sitio oficial del MINSAP https://salud.msp.gob.cu.
A pesar de la constancia en dichos reportes, la veracidad de la información y la transparencia de la misma ha sido criticada por gran parte de la población y por científicos cubanos. Varios medios de prensa y comunicación han denunciado hechos que indican que las autoridades sanitarias cubanas están ocultando información y publicando números de contagios menores a los reales.
En el artículo "Gobierno cubano silencia información de la COVID-19 para mantener el turismo nacional" publicado el pasado 16 de agosto en ADN Cuba el autor Samuel Díaz alerta que el director nacional de higiene y epidemiología Dr. Duran el 12 de agosto no informó que 2 trabajadores de hoteles de Varadero, uno de ellos bailarín del Hotel Tuxpan, resultaron positivos al test diagnóstico de COVID-19.
En otro artículo del 16 de agosto del medio Cibercuba, titulado "Se enfrenta a brote de COVID-19 en la cárcel de Cuba donde cumple 5 años por fumar marihuana" de la periodista Tania Costa, se afirma que existe un brote de COVID-19 en la prisión Toledo II del municipio Marianao de La Habana. Según el citado medio, 2 convictos fueron encerrados junto a otros 198 presos y las autoridades carcelarias prohibieron las visitas de los familiares al centro penitenciario así como cortaron todo tipo de comunicación entre los sentenciados y sus familias.
La manipulación de datos es preocupante pero aún peor es el tratamiento diferencial y negligente.
El lunes 7 de septiembre, un venezolano residente en Cuba y trabajador de las oficinas de Telesur en La Habana fue positivo al test de RT-PCR de COVID-19. La decisión que se tomó fue aislar desde el martes 8 de septiembre a 73 miembros de dicho medio de comunicación, incluyendo a la periodista Fabiola López. Estos ciudadanos no fueron ubicados en comunes centros de aislamientos destinados a la población cubana sino que fueron aislados en un hotel de La Marina Hemingway. Contrario a lo indicado por el MINSAP para personas sospechosas de COVID-19 en la población, en este caso transportaron diariamente a estos 73 trabajadores desde su aislamiento de lujo hasta las oficinas de Telesur localizadas en calle 25 entre 10 y 12, en El Vedado para que pudieran trabajar. Este sábado 12 de septiembre se conoció que los resultados del diagnóstico de estos trabajadores fueron negativos a COVID-19 en todos los casos.
La aplicación de multas excesivas de 2000 pesos y las condenas de privación de libertad impuestas a ciudadanos por "mal uso del nasobuco", como tener la nariz fuera del mismo o retirarlo para tomar agua o consumir un alimento en la vía pública, contrastan con otras decisiones tomadas por el MINSAP o tal vez a mayor nivel.
Una doctora cirujana de la ciudad de Ciego de Ávila, comenzó con síntomas relacionado con COVID-19, pero contrario a lo establecido, sus superiores le ordenaron continuar trabajando hasta que se conociera el resultado del RT-PCR. Las autoridades sanitarias identificaron más de 150 contactos de dicha profesional de la salud cubana, entre los que se encuentra un sacerdote de la Iglesia Católica, quien fue trasladado para un centro de aislamiento creado en un pre universitario en el pueblo Ceballos. La cirujana que se mantuvo trabajando recibió el resultado del RT-PCR de COVID-19 y fue positivo. ¿Cuantas personas se contagiaron como consecuencia de la pésima decisión tomada por los jefes de esta doctora? ¿Quiénes son todos los responsables de esta gran negligencia? ¿El MINSAP sancionará a dichos responsables? Las respuestas a estas preguntas siguen pendientes y probablemente nunca sean publicadas por los medios oficialistas.
Yo, Oscar Casanella, afirmo que el MINSAP ha ocultado información sobre los fallecimientos por COVID-19, malas praxis relacionadas con los mismos y otros datos. El último día que el MINSAP publicó los hospitales donde se atendía cada paciente positivo de COVID-19 fue el 8 de abril.
Recuerden la negligencia médica en el caso del cubano residente en el Cerro cuya muerte fue informada el 11 de julio.
Muchos cubanos cuestionan la veracidad de la información publicada por el MINSAP debido a las numerosas evidencias y experiencias de personas que contradicen los datos oficiales. Los medios de prensa independientes y las redes sociales, a pesar de su menor alcance dentro de la isla, han logrado brindar noticias sobre la epidemia de COVID-19 con mayor inmediatez y confiabilidad que los estatales. El pueblo cubano tiene derecho a conocer la situación real de esta epidemia.