EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO
Proyecto de ley para penalizar los actos de repudio
Por. Juan Juan Almeida
Para garantizar
la prevalencia de la solidaridad y el respeto, urge un proyecto de ley
que penalice los actos de repudio y exija responsabilidad penal para sus
autores y cómplices
la prevalencia de la solidaridad y el respeto, urge un proyecto de ley
que penalice los actos de repudio y exija responsabilidad penal para sus
autores y cómplices
Reporta Cuba Opositores sufren asedio y actos de repudio Placetas FotoLos cubanos estamos viviendo un
inequívoco desplome social y una pérdida de valores que debemos, para el
bien de todos, restituir. El Gobierno tiene mucha culpa en este
fenómeno que subyace en la conducta ciudadana. Acaso pensó que era tarea
suficiente brindarnos la oportunidad de una conveniente superación
profesional; y al decretar que la buena educación era rezago pequeño
burgués, creó el "antivalor".
Es cierto, aunque algo tardío, la Iglesia Católica
desempeña un papel importante en revertir el proceso de degradación
moral y, desde hace unos meses, la televisión cubana difunde con
insistencia mensajes relacionados con la educación social. Encomiable,
pero no basta, y no deja de ser cínico e irónico hacer campaña de este
tipo cuando se estimula y gratifica la animalada y la grosería.
Resulta contradictorio que en Cuba, donde los índices de instrucción
son explícitamente elevados, la educación formal esté absolutamente
fracturada, y desestimada por las autoridades.
¿Qué tipo de educación se puede inculcar en un niño que convive con la impunidad de
alguien que, sin legítima razón, ejerce violencia sobre sus iguales, o
agrede la dignidad y la integridad física de terceros
provocando lesiones con secuelas anatómicas, fisiológicas y/o psíquicas?
Somos un pueblo apasionado, entiendo el defender con ahínco
determinadas convicciones, y que en las circunstancias actuales el
Gobierno necesita mostrar superioridad y control; pero el ignominioso acto de repudio
es una forma de discriminación que pretende perseguir, hostigar y
ejercer la dominación de un grupo social sobre otro, es la vulgarización
del desacuerdo y una cotidiana erosión a los mecanismos sociales.
¿Cuántas veces no hemos visto cómo un grupo de personas, impunes,
pero fuera de los casos autorizados por la ley, penetran empleando
violencia, fuerza e incluso intimidación en domicilios ajenos sin la
voluntad expresa o tácita de su moradores? Internet está lleno de
ejemplos.
A estas alturas, es imposible lograr buenas formas de conducta, y que
la cortesía social se incorpore a la personalidad del cubano, sin antes
penalizar actuaciones semejantes que ponen en peligro el equilibrio de la convivencia y las relaciones sociales.
Hoy, para garantizar la prevalencia de la solidaridad y el respeto, urge un proyecto de ley que penalice los actos de repudio y exija responsabilidad penal para
sus autores y cómplices, adecuar sanciones que vayan desde la
prohibición de frecuentar medios o lugares determinados, la prohibición
del ejercicio de una profesión, cargo u oficio, amonestación, multa,
limitación de libertad, el trabajo correccional con o sin internamiento,
hasta la privación de libertad; según el grado de peligro social del
hecho, las circunstancias concurrentes en el mismo y sus consecuencias,
así como los antecedentes penales, la reincidencia y/o
multirreincidencia de los "repudiantes" implicados en tan intolerables
arrebatos de ira y violencia.
La sociedad nos pertenece por igual, impulsar un proyecto de ley de
esta naturaleza no es confrontar al Estado, no socava ninguna de sus
ineficientes instituciones, no enardece a nadie; es solamente una forma
cívica y civilizada de alentar la convivencia respetuosa entre cubanos porque cuando las alertas sociales son tan claramente visibles, es responsabilidad de todos hacer caso y actuar.