Los hijos son los primeros en pagar el compromiso político de un opositor en la Isla
El corto documental Prisioneros políticos en Cuba. Avatares de la familia se proyectó este jueves en Miami para denunciar el "aislamiento, señalamiento y exclusión social" que, según su autor, sufren las familias de los disidentes cubanos presos.
Rolando Rodríguez Lobaina, realizador de la cinta, muestra en 29 minutos de entrevistas a familiares y exprisioneros políticos la realidad en los hogares de los opositores al régimen castrista.
Según dijo a EFE este ingeniero informático, todos los casos recogidos reflejan un denominador común: la "pesadilla" que sufre la familia entera cuando uno de sus miembros es arrestado por razones políticas, el "castigo que le impone el régimen".
Rodríguez presentó el documental en la Casa Bacardí/Instituto de Estudios Cubanos y Cubano-Americanos, dependiente de la Universidad de Miami (UM), donde expuso su propia experiencia de expreso político y de cómo, convertido en apestado por el régimen, ese destino alcanza también a su hijo en la escuela.
Y es que, los "primeros en pagar" el compromiso ético y político de un opositor en la Isla son los hijos.
"Llevo 20 años en la lucha y sobre mi hijo, que tiene nueve años, pesa en la escuela el expediente de opositor de su padre, del que le dicen que es lo peor y le siembran la semilla del odio", dijo.
De manera que "no solo está preso el disidente, sino también la familia, que tiene que vivir bajo permanentes ofensas, vituperación y la exclusión de los vecinos, a los que el régimen trata de aislar de la familia" del preso político.
Producido por la agencia audiovisual independiente Palenque Visión, Rodríguez tardó dos años en completar el documental en el que entrevista a diez miembros de diferentes familias de opositores que denuncian las medidas represivas que sufren, con allanamientos constantes, saqueos, abuso policial y actos de repudio vecinal.
El arresto de un opositor entraña un "cataclismo en las familias. Se quedan desamparadas y los niños traumatizados con los registros y detenciones y cacheos", señaló uno de los entrevistados.
Esposas jóvenes, madres, hijos y parientes de prisioneros políticos cubanos hablan de sus terribles experiencias, de los actos vandálicos que sufren, entre otros el de personas que les arrojan "chapapote a la casa, huevos, piedras o excrementos de cerdo".
Y todos estos actos de acoso e intimidación, precisó Rodríguez, se siguen produciendo hoy por una "poderosa maquinaria represiva del régimen que compra partidos y firmas en el contexto internacional" mientras "silencia" los abusos que perpetra contra los opositores y sus familias.
Rodríguez, que logró enviar el documental fuera de la Isla en 2016, resumió en sus declaraciones que el objetivo de su trabajo es llamar la atención internacional sobre el "terrible sufrimiento de las familias de los presos políticos, víctimas de la intolerancia, la exclusión social y el 'apartheid'".
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