USA 11 de Septiembre. Por Angélica Mora: HACE 11 AÑOS

Apuntes de una Periodista, por Angélica Mora: HACE 11 AÑOS

EL MOVIMIENTO BLOGGER, ESTA LLAMADO A SER EL CATALIZADOR MORAL DE LOS GOBIERNOS, ANTE LOS OJOS DEL MUNDO

HACE 11 AÑOS

Angélica Mora

Apuntes de una Periodista

Nueva York

 

Hoy el estado de Nueva York, junto con los otros 49 que conforman la nación, ha amanecido lleno de banderas.

 

  Casas, residencias, edificios públicos y privados han colocado el emblema patrio en un sentido recuerdo a los caídos en los ataques terroristas contra las torres en Manhattan y el Pentágono en Washington.

 

 

Las banderas también ondean este 11 de septiembre en homenaje y agradecimiento a los miles de policías, bomberos y funcionarios públicos que acudieron al rescate.

 

 

Y también flamean por los pasajeros del avión que fue desviado y cayó en un campo en el estado de Pensilvania, que iba a ser estrellado como un proyectil contra la Casa Blanca o el Congreso.

 

 

Las banderas son también un gesto de desafío a los terroristas que amenazan cada segundo de nuestras vidas y a quienes se les demuestra que el país sigue adelante viviendo, a pesar de todo el horror del pasado y de la zozobra del futuro.

 

 

 

ANTES Y DESPUÉS

 

Hace exactamente 11 años, al hablar sobre la tragedia del 11 de septiembre dije que Estados Unidos, y el mundo en general, nunca iban a ser los mismos.

 

 

 Aquí los estadounidenses hemos sacrificado libertades públicas y personales que han cambiado cada aspecto de la vida. Libertades que antes se daban como algo en lo que no se pensaba mucho porque habían estado siempre

ahí.   

 

NOSOTROS Y EL ENEMIGO

 

Se han gastado hasta el momento, sin contar las guerras en Afganistán e Irak, 280 mil millones de dólares en apuntalar la defensa del país.  Se han hecho algunos progresos, pero no los suficientes para detener otro ataque como el de hace cinco años. La nación permanece vulnerable y próxima a otra catástrofe.

 

Como muchos comentan: “no es qué va a pasar… es cuándo”.

 

Expertos en materias de seguridad han dicho que Washington debería fortalecer las prioridades y adoptar una estrategia a largo término que refleje un completo entendimiento del enemigo. ¡Fácil de decir, pero no de poner en práctica!

 

Por su parte, funcionarios del gobierno de los Estados Unidos comentan este 11 de septiembre que la nación ha evitado un nuevo ataque como el de esa fecha, pero tampoco se hacen grandes ilusiones de que no va a ocurrir de nuevo.

 

Los entendidos en seguridad han dicho que la nación enfrenta en estos momentos más amenazas que las que el gobierno puede contrarrestar.

 

 

BATALLA

 

Todo se ha convertido en un juego mortal de gato contra ratón. El ratón puede eludir los zarpazos por un tiempo, pero si se descuida... el golpe puede ser fatal.

 

Veamos parte de las estrategias y como el enemigo trabaja: en los aeropuertos desde hace cinco años se prohíben las navajas y todos los objetos cortantes, los terroristas tratan las bombas que pueden activarse en los zapatos. Se revisan los zapatos y los extremistas tratan los explosivos líquidos.

 

Y no sólo el mortal juego es en los aeropuertos. Miles de agentes del FBI, policías y empleados en seguridad patrullan carreteras, reactores nucleares, estaciones de trenes y metros, puertos, puentes y edificios que pueden ser blanco de ataques terroristas.

 

Se han gastado millones en computadoras y sistemas de detectar explosivos, radiaciones y gérmenes mortales y al enemigo como individuo.

 

“Hay que pensar como terrorista para neutralizarlos” dice Steven Benner, un policía especializado en seguridad , que viste de civil para trabajar de incógnito en el estado de Maryland. “Observo gente que parece fuera de lugar, como los que se estacionan en zonas restringidas, y toman notas y fotos…aunque buscamos también a los que actúan en una forma no tan obvia”.  

 

“Ellos (los terroristas), no se guían hoy por el libro y yo tampoco”.

 

Desde que la policía británica frustró un complot para hacer estallar aviones con explosivos usando líquidos y gelatina la seguridad se ha centralizado en esta clase de materiales. Pero hay otros peligros latentes. Los aviones son amenazados a diario con la posibilidad de bombas en la carga, secuestradores usando métodos nuevos y disparos de misiles desde la tierra.

 

Toda esta amenaza sin contar que los terroristas pueden usar fanáticos suicidas que empleen bombas de tiempo líquidas, tragadas antes del vuelo, imposibles de detectar por las tradicionales máquinas de rayos equis de los aeropuertos.

 

Los expertos ya están tratando de contrarrestar este peligro.

 

UN PASO ADELANTE

 

Es cierto. Hay que pensar como un terrorista.  Este juego de ganarle al enemigo es hoy a escala mundial y felizmente los funcionarios de seguridad han estado hasta ahora, después del 11 de septiembre del 2001, un paso delante y han detenido varios  complots antes de que estos se realizaran, pero muchos nos preguntamos  ¿hasta cuándo nos acompañara la suerte?